El aparato urogenital lo constituyen un conjunto de órganos que participan en dos funciones principales: la elaboración y excreción de la orina(los órganos urinarios) y la producción de células sexuales, la fecundación y la gestación (los órganos genitales).
Órganos urinarios
Elaboran y eliminan la orina hacia el exterior de nuestro organismo.
La elaboración de le orina se lleva a cabo en los riñones y, desde ellos, es conducida a través de dos conductos, los uréteres hasta una vesícula almacenamiento temporal, la vejiga de la orina, desde la que se expulsara al exterior por un conducto, la uretra.
El riñón es el órgano secretor de la orina, además, produce hormonas que son liberadas a la sangre. Es un órgano par, de color marrón rojizo, extiendo uno en la parte derecha y otro en la parte izquierda de la cavidad abdominal.
Se sitúan adheridos a la pared posterior del abdomen, en su parte más alta, quedando por debajo del hígado en la parte derecha y por detrás del estomago en la izquierda.
Ambos riñones se sitúan por detrás de la serosa peritoneal, dentro de una celda fibroadiposa en la que se diferencia una grasa que recubre al riñón, la grasa pararrenal y una capsula fibrosa que constituye la fascia renal.
Los riñones tienen forma de alubia, siendo convexos hacia fuera y cóncavos hacia dentro. Por su parte cóncava penetran los vasos sanguíneos y sale la pelvis renal para continuarse con el uréter. A esta parte cóncava se la llama hilio renal. Por el hilio renal penetra una arteria, la arteria renal y sale una vena, la vena renal.
Al cortar un riñón, se aprecian dos partes distintas; una periférica, la corteza renal y otro central la médula renal, que hacia el hilio renal contacta con una cavidad, la pelvis renal.
Microscópicamente está formada por un sinfín de pequeñas unidades, las nefronas. Cada nefrona tiene una pequeña porción vascular, el glomérulo renal que contacta con un sistema de pequeños conductillos (capsula de Bowman, conducto contorneado proximal, asa de Henle, conducto contorneado distal y conducto colector.
Entre otras funciones, el riñón actúa como un gran filtro de la sangre. Desde el glomérulo el liquido y componentes químicos no celulares de la sangre son filtrados hacia la capsula de Bowman y el sistema de conductillos, donde se producen procesos de reabsorción y secreción, hasta formar la orina definitiva que, por el conductor colector, llegara a la pelvis renal.
La sangre la llega al riñón por la arteria renal, rama de la arteria aorta, sale a través de la vena renal hacia la vena cava inferior.
En definitiva, del riñón saldrán : la sangre filtrada que, habiendo eliminado los desechos hacia la orina, después de pasar por los sistemas de filtrado renal, retorna a la circulación general y la orina, conteniendo los productos de desecho, es eliminado al exterior.
La orina formada será transportada a través de dos conductos, los uréteres, uno izquierdo y otro derecho que recorren la pared posterior del abdomen a ambos lados de la columna vertebral hasta llegar a la pelvis, terminando en la vejiga de la orina.
La vejiga es una bolsa muscular, recubierta por dentro de una mucosa, en la que se almacena la orina que, lentamente se forma en el riñón y es transportada por el uréter llegando a la vejiga a modo de chorros intermitentes.
Cuando esta vacía se localiza totalmente en la pelvis y cuando alcanza el máximo volumen llenado puede sobrepasar el límite superior de la misma.
Presenta tres paredes: superior, anterior y posterior.
Las paredes anterior y superior confluyen a modo de embudo aplastado en su parte inferior en un vértice, del que parte la uretra.
En su parte baja, vista dentro, presenta tres orificios, dos en la pared posterior que se corresponden con la desembocadura de los uréteres y uno en el vértice inferior, el inicio de la uretra.
Presenta una pared muscular que aparece reforzada en el inicio de la uretra formando el esfínter de la uretra, un musculo circular que cierra el paso de la orina y la retiene en la propia vejiga. La función de la vejiga consiste en almacenarla orina hasta que llegue el momento de su eliminación. Para ello, el musculo liso que forma la pared vesical tiene dos tipos de contracción: una contracción débil y sostenida, que se mantiene durante el llenado de la vejiga (el tono vesical) y una contracción intensa y rápida, que se produce en el momento de la expulsión de la orina.
Cuando la vejiga está repleta de orina, se relaja el esfínter interno permitiendo el paso de la orina hacia la porción inicial de la uretra, a la vez que su pared muscular empieza a contraerse para evacuar la orina al exterior. Es en ese momento cuando el individuo siente la necesidad de orinar. La capacidad vesical en la que aparece la sensación de plenitud y se relaja el esfínter interno es de 300 a 350 ml; sin embargo, el reflejo de la micción puede ser inhibido voluntariamente mediante la contracción del esfínter externo hasta que la vejiga contiene alrededor de 800 ml de orina.
La uretra es un conducto con distinto desarrollo dependiendo del sexo.
En la mujer esta menos desarrollada, mientras que en el varón alcanza un mayor desarrollo. Ello es debida a que en la mujer solo actúa como conducto evacuador de la orina, mientras que en el varón forma parte del pene y participa también en la copula como un elemento más del aparato genital.
La uretra comunica con el exterior después de atravesar la pared muscular que forma el suelo de la pelvis y que recibe el nombre de periné. El periné está formado por varios musculares y en el plano intermedio se dispone un musculo circular en torno a la uretra que se llama el esfínter externa de la uretra, cuya relajación o contracción es voluntaria, a diferencia del esfínter interno. Cuando el esfínter externo se relaja, la orina sale al exterior.
La uretra de la mujer es recta y desemboca en la parte anterior de la vulva mientras que en el varón presenta tres porciones: prostática, membranosa y peneana, desembocando en el glande del pene.
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| Utera feminina |
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| Uretra masculina |
En el sexo masculino la uretra guarda una estrecha relación con glándulas genitales de las cuales la más importante es la próstata y con estructuras venosas que formaran parte del pene como lo veremos más adelante.
Órganos genitales
Tanto en el varón como en la mujer, se diferencian dos tipos de órganos genitales : internos y externos.
Los genitales internos están formados por las gónadas y los conductos que desde las gónadas comunican con el exterior, estos últimos relacionados con una serie de glándulas accesorias.
Sistema reproductor en el varón
La gónada del varón recibe el nombre de testículo o dídimo. El testículo es una glándula ovoide de aproximadamente 4 cm de largo por 2,5 cm de ancho. Está formada por un sistema canalicular, los túbulos seminíferos, en los que se disponen tres tipos de células nobles: las células endocrinas o células de Leydig, las espermatogonias y las células de Sertoli. Las primeras elaboran las hormonas sexuales masculinas y a partir de las segundas se forman los espermatozoides o células sexuales masculinas; a la células de Sertoli se les tribuye una función de soporte.
Los túbulos seminíferos se continúan dentro del testículo con otra red de conductos: los túbulos rectos, la red de Haller y los conductillos eferentes que llegan al epidídimo.
Desde su formación en los túbulos seminíferos los espermatozoides recorren todo el sistema canalicular del testículo hasta el epidídimo y desde aquí, a través de un conducto más grueso, el conducto deferente, se dirigen hacia la pelvis.
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| espermatozoide |
El conducto deferente desde el epidídimo asciende formando parte del cordón espermático y atraviesa la pared de la cavidad abdominal, por el conducto inguinal, llegando así a la pelvis. En la pelvis, por detrás de la vejiga de la orina, se une al conducto que procede de la vesícula seminal que es una glándula accesoria situada por detrás de la vejiga.
Una vez unido el conducto deferente al conducto de la vesícula seminal se forma el conducto eyaculador que es un conducto corto y recto que, atravesando la próstata desemboca en la uretra.
Hasta llegar a la uretra, todos los órganos genitales del varón son dobles, uno izquierdo y otro derecho.
La próstata es una glándula accesoria compacta situada por debajo de la vejiga de la orina, por delante del recto(a través del cual se la puede palpar), en torno al esfínter interno y por encima del esfínter externo de la uretra. Esta atravesada por la uretra, la porción prostática de la misma y los dos conductos eyaculadores.
Las glándulas boulbouretrales son otras glándulas accesorias, también llamadas glándulas de Cowper; son muy pequeñas y se sitúan a la altura del esfínter externo de la uretra. Las glándulas accesorias producen un liquido viscoso que, al mezclarse con la secreción testicular constituyen el semen.
Los genitales externos masculinos son el escroto y el pene.
El escroto es una bolsa cutáneo-musculo-fibrosa que contiene al testículo y cuelga debajo del pubis. En su interior, además del testículo, se localiza el epidídimo, la porción inicial del conducto deferente y los vasos y nervios que irrigan e inervan al testículo y al proprio escroto.
El pene es una estructura cilíndrica suspendida de la parte anterior del periné o suelo de la cavidad pélvica. Está formado por tres cilindros de naturaleza venosa: dos cuerpos cavernosos y un cuerpo esponjoso que están rodeados por una vaina fibrosa y la piel.
El cuerpo esponjoso tiene dos ensanchamientos, una distal, en el extremo libre del pene, el glande y otro proximal, en relación con el periné, el bulbo esponjoso. La uretra peneana llega al pene atravesando el bulbo esponjoso y posteriormente discurre por el interior del cuerpo esponjoso hasta llegar al glande donde desemboca a través de un orificio, el meato urinario. La piel que recubre el pene, a la altura del glande, forma una repliegue que se continuara con la mucosa que reviste el glande; el repliegue cutáneo recibe el nombre de prepucio.
El cuerpo esponjoso tiene dos ensanchamientos, una distal, en el extremo libre del pene, el glande y otro proximal, en relación con el periné, el bulbo esponjoso. La uretra peneana llega al pene atravesando el bulbo esponjoso y posteriormente discurre por el interior del cuerpo esponjoso hasta llegar al glande donde desemboca a través de un orificio, el meato urinario. La piel que recubre el pene, a la altura del glande, forma una repliegue que se continuara con la mucosa que reviste el glande; el repliegue cutáneo recibe el nombre de prepucio.
Sistema reproductor en la mujer
La gónada femenina es el ovario. A diferencia de la masculina, se localiza en el interior de la cavidad pélvica, próxima a la pared posterior y lateral.
Hay dos ovarios, uno izquierda y otro derecho, y presentan dos funciones principales: la producción de hormonas sexuales femeninas y la formación de las células sexuales femeninas, los óvulos. Están formados por pequeñas estructuras denominadas folículos ováricos, que a lo largo de los distintos ciclos menstruales van adquiriendo sucesivos desarrollos y culminan con la expulsión de un oocito de 2° orden, futuro ovulo, hacia la mitad de cada ciclo.
Los ovarios están unidos a la pared pélvica a través de repliegues ligamentosos peritoneales que los mantienen en su posición.
El sistema de conductos en el sexo femenino se inicia en dos estructuras, una a cada lado, que reciben el nombre de trompas de Falopio o uterinas.
Las trompas presentan una porción lateral dilatada que recibe el nombre de porción ampular que, en las proximidades del ovario aparece desflecada formando las fimbrias, encargadas de captar el oocito cuando sale del ovario. Dirigiéndose hacia la línea media, en busca del útero aparecen más estrechadas y se abren a la luz de un órgano impar y medio que es el útero, el cual se abre al exterior a través de la vagina.
Cuando los espermatozoides son expulsados durante la copula, se depositan en la vagina y desde ahí ascienden por el útero hasta las trompas, fecundando al ovulo en el tercio externo, la porción ampular de la trompa. El huevo fecundado es transportado a través de la trompa uterina, durante la primera semana de gestación, hasta el útero donde va a anidar.
El útero es una estructura hueca situada en la cavidad pélvica, por detrás de la vejiga de la orina y por delante del recto. Cuando la mujer no es gestante y está en edad de procrear, mide unos 7 cm de largo, por 5 de ancho y 2,5 de profundidad. Dado que durante la gestación aumenta considerablemente su tamaño, los vasos uterinos siguen un trayecto sinuoso permitiendo así su estiramiento. En el útero se diferencia una porción principal, el cuerpo que por arriba termina en un borde libre, el fondo, y por abajo se abre a la vagina a través del cuello. De dentro a fuera, presenta una mucosa que sufre cambios cíclicos y, si no hay fecundación, se descama al final del ciclo menstrual dando lugar a la menstruación; envolviéndola, aparece una capa muscular gruesa y potente, el miometrio, responsable de la expulsión del feto en el momento del parto.
La vagina es un conducto muy extensible localizado por detrás de la uretra y la vejiga de orina y por delante del recto y el conducto anal. Se dirige hacia arriba y hacia atrás, mientras que el útero lo hace hacia arriba y hacia delante. El cuello del útero hace prominencia sobre el fondo de la vagina. Presenta una capa muscular muy elástica recubierta por una mucosa que, también, sufre cambios cíclicos. Es el lugar donde se realiza la copula. Desemboca a nivel de la vulva.
Los genitales externos en la mujer están constituidos por la vulva. Está situada en la parte inferior y anterior del periné y presenta una serie de pliegues cutáneo-mucosos, labios mayores y menores que delimitan un espacio llamado vestíbulo en el que desembocan, en su parte anterior, la uretra y, en su parte posterior, la vagina. En su parte anterior y media se sitúa el clítoris, órgano eréctil femenino.
Al igual que ocurre en el varón, en la mujer existen una serie de glándulas anexas uretrales y periuretrales, vulvovaginales o de Bartholino.
El aparato genital está muy bien irrigado, el aporte sanguíneo procede de dos sistemas arteriales distintos, uno lo forman las arterias gonadales, que parten directamente de la arteria aorta abdominal, es la arteria espermática o ovárica, dependiendo del sexo, son dos arterias, una izquierda y otra derecha que irrigaran principalmente a la gónada y sus anexos. El otro sistema procede de la arteria iliaca interna y son las arterias genitales prostáticas en el varón y uterinas en la mujer. La sangre es recogida por un sistema venoso, también doble: de las arterias gonadales será recogido por las venas gonadales que drenan a la vena cava inferior en el lado derecho y a la vena renal en el izquierdo, la sangre de las venas genitales será recogida por un plexo venoso profuso a nivel de la pelvis que, en definitiva drena a las venas iliacas internas. Los genitales externos reciben sangre de dos sistemas arteriales, las arterias pudendas internas y externas y la drenan hacia las venas del mismo nombre.
Recomendaciones para el tanatopractor
La gónada femenina es el ovario. A diferencia de la masculina, se localiza en el interior de la cavidad pélvica, próxima a la pared posterior y lateral.
Hay dos ovarios, uno izquierda y otro derecho, y presentan dos funciones principales: la producción de hormonas sexuales femeninas y la formación de las células sexuales femeninas, los óvulos. Están formados por pequeñas estructuras denominadas folículos ováricos, que a lo largo de los distintos ciclos menstruales van adquiriendo sucesivos desarrollos y culminan con la expulsión de un oocito de 2° orden, futuro ovulo, hacia la mitad de cada ciclo.
Los ovarios están unidos a la pared pélvica a través de repliegues ligamentosos peritoneales que los mantienen en su posición.
El sistema de conductos en el sexo femenino se inicia en dos estructuras, una a cada lado, que reciben el nombre de trompas de Falopio o uterinas.
Las trompas presentan una porción lateral dilatada que recibe el nombre de porción ampular que, en las proximidades del ovario aparece desflecada formando las fimbrias, encargadas de captar el oocito cuando sale del ovario. Dirigiéndose hacia la línea media, en busca del útero aparecen más estrechadas y se abren a la luz de un órgano impar y medio que es el útero, el cual se abre al exterior a través de la vagina.
Cuando los espermatozoides son expulsados durante la copula, se depositan en la vagina y desde ahí ascienden por el útero hasta las trompas, fecundando al ovulo en el tercio externo, la porción ampular de la trompa. El huevo fecundado es transportado a través de la trompa uterina, durante la primera semana de gestación, hasta el útero donde va a anidar.
El útero es una estructura hueca situada en la cavidad pélvica, por detrás de la vejiga de la orina y por delante del recto. Cuando la mujer no es gestante y está en edad de procrear, mide unos 7 cm de largo, por 5 de ancho y 2,5 de profundidad. Dado que durante la gestación aumenta considerablemente su tamaño, los vasos uterinos siguen un trayecto sinuoso permitiendo así su estiramiento. En el útero se diferencia una porción principal, el cuerpo que por arriba termina en un borde libre, el fondo, y por abajo se abre a la vagina a través del cuello. De dentro a fuera, presenta una mucosa que sufre cambios cíclicos y, si no hay fecundación, se descama al final del ciclo menstrual dando lugar a la menstruación; envolviéndola, aparece una capa muscular gruesa y potente, el miometrio, responsable de la expulsión del feto en el momento del parto.
La vagina es un conducto muy extensible localizado por detrás de la uretra y la vejiga de orina y por delante del recto y el conducto anal. Se dirige hacia arriba y hacia atrás, mientras que el útero lo hace hacia arriba y hacia delante. El cuello del útero hace prominencia sobre el fondo de la vagina. Presenta una capa muscular muy elástica recubierta por una mucosa que, también, sufre cambios cíclicos. Es el lugar donde se realiza la copula. Desemboca a nivel de la vulva.
Los genitales externos en la mujer están constituidos por la vulva. Está situada en la parte inferior y anterior del periné y presenta una serie de pliegues cutáneo-mucosos, labios mayores y menores que delimitan un espacio llamado vestíbulo en el que desembocan, en su parte anterior, la uretra y, en su parte posterior, la vagina. En su parte anterior y media se sitúa el clítoris, órgano eréctil femenino.
Al igual que ocurre en el varón, en la mujer existen una serie de glándulas anexas uretrales y periuretrales, vulvovaginales o de Bartholino.
El aparato genital está muy bien irrigado, el aporte sanguíneo procede de dos sistemas arteriales distintos, uno lo forman las arterias gonadales, que parten directamente de la arteria aorta abdominal, es la arteria espermática o ovárica, dependiendo del sexo, son dos arterias, una izquierda y otra derecha que irrigaran principalmente a la gónada y sus anexos. El otro sistema procede de la arteria iliaca interna y son las arterias genitales prostáticas en el varón y uterinas en la mujer. La sangre es recogida por un sistema venoso, también doble: de las arterias gonadales será recogido por las venas gonadales que drenan a la vena cava inferior en el lado derecho y a la vena renal en el izquierdo, la sangre de las venas genitales será recogida por un plexo venoso profuso a nivel de la pelvis que, en definitiva drena a las venas iliacas internas. Los genitales externos reciben sangre de dos sistemas arteriales, las arterias pudendas internas y externas y la drenan hacia las venas del mismo nombre.
Recomendaciones para el tanatopractor
- Debemos recordar que es el útero que, probablemente más resiste los efectos de la putrefacción, pudiendo estar conservada en cadáveres que tras varias semanas han perdido parcial o totalmente otros órganos; esto nos permitirá determinar en estos casos facialmente el sexo del cadáver.
- Es interesante conocer que mujeres embarazadas que han fallecido, durante el “rigor mortis”, por contracción de la pared muscular, pueden expulsar el feto contenido dentro de la cavidad uterina.
- El cáncer de la próstata (adenocarcinoma) es uno de los tumores más comunes en el varón; aproximadamente el 60% de las autopsias de varones de más de 80 años demuestran la presencia de este tipo de tumor.
Autor del articulo : Maria del Rosario S.
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